Julien Faubert ha pasado a la historia como uno de los fichajes más curiosos de la historia del Real Madrid. El 30 de enero de 2009, el Madrid cerró su cesión con el West Ham por 1,5 millones de euros, después de fallar en su intento de fichar a Antonio Valencia, el ecuatoriano que por ese entonces jugaba en el Wigan. Tanto el club blanco como la afición madridista se toparon con una frase: lo barato sale caro.
Juande Ramos, que dio el `ok´ a su cesión, apenas le dio 52 minutos y dejó para la hemeroteca su imagen dormido en un banquillo, y terminó saliendo de la peor manera posible. Desde entonces, ha recalado en varios equipos hasta acabar, con 36 años, en el Frejus-Saint Raphael de la cuarta división francesa. Ahora Faubert ha concedido una entrevista a «The Athletic», recordando su sorprendente fichaje por el Real Madrid.
«Estábamos en el autobús del equipo camino a Upton Park para jugar contra Fulham. Recibí una llamada de una persona del Real Madrid y me dijo: ‘Hola, trabajo para el Real Madrid y tenemos que hablar contigo. Le dije que tenía un partido importante que preparar y que no tenía tiempo para ese tipo de basura. Apagué mi teléfono, jugamos el partido y luego, volví a encender mi teléfono y vi alrededor de 30 mensajes de texto y 50 mensajes de voz. Fue entonces cuando supe que era serio. Entonces llamé a mi agente (Yvan Le Mee) y me dijo que teníamos que hablar con el Real Madrid porque estaban en un hotel en Heathrow. Era el último día de la ventana de fichajes y fuimos allí y comenzamos a comerciar”, afirmó el exmadridista.
En primera instancia, Faubert, por entonces de 25 años, no daba crédito a lo que le estaba ocurriendo. Sus compañeros del West Ham tampoco: “Tenía muchos sentimientos pero estaba feliz, es el Real Madrid, ya sabes. Cuando me di cuenta de que no era un error, recé para que las negociaciones fueran bien. En realidad querían a Antonio Valencia, pero él firmó con el Manchester United, así que yo fui la segunda opción. Cuando se hizo el trato, volví a recoger algunas de mis cosas de West Ham y algunos de mis compañeros comenzaron a reír. Eran bromas como: ‘Julien, ¿te das cuenta de dónde estás?’. Esto es Real, maldita sea. Recuerdo que Mark Noble siguió ignorándome y pensé:» Mark, ¿cuál es el problema? «Él dijo: ‘Julien, no puedo hablarte, eres un jugador del Real Madrid. Ya no dependemos de ti’. Entonces hubo muchos chistes”.
Faubert explicó que su imagen con los ojos cerrados en el banquillo del Madrid durante un partido ante el Villarreal ocupó el foco en la charla con «The Athletic». El francés sigue negando que estuviese dormido. “Cuando estaba en el banquillo, cerré los ojos durante unos 30 segundos y pensaron que estaba enfadado porque no estaba jugando y dijeron: ‘Está bien, este tipo está dormido’. El presidente me dijo que debía de tener cuidado porque hay fotógrafos y cámaras en todas partes. La verdad que aprendí mucho de esta experiencia”, concluyó.
Esta curiosa anécdota de Faubert lo condenó a ser sin duda, uno de los peores fichajes en la historia del Real Madrid. El fatídico paso de Julien por el Madrid desencadenó en que su carrera deportiva se estancara.