En el día de hoy, martes 21 de abril, se cumplen ocho años del día en el que Cristiano Ronaldo pidió calma al Camp Nou, tras marcar el 1-2 que definiría el encuentro. Además, sirvió como sentencia para la consecución del campeonato liguero por parte del Real Madrid.
El Real Madrid llegaba al Camp Nou con la liga encarrilada, aunque se la jugaba contra su máximo rival, el Barcelona. Era un partido clave para el devenir del campeonato liguero. Si el Real Madrid ganaba, tendría la liga prácticamente ganada; si empataba, tendría una ventaja favorable respecto a los culés; si perdía, podría complicarse la vida en las últimas jornadas.
Todo empezó de cara para el conjunto blanco, cuando en el minuto 16, Khedira aprovechó un barullo en el área pequeña, para introducir el balón en la portería, y adelantar a los de Mourinho en el marcador. El partido se mantuvo así hasta el minuto 70, momento en el que Alexis igualó el luminoso tras un rechace, abriendo un atisbo de esperanza para los culés. Pero poco le duró la ilusión al Barcelona, ya que tres minutos después, Ozil dio una asistencia maravillosa a Cristiano, y este no falló ante la salida de Valdés. Un gol que significaba mucho en ese instante, ya que mataba el partido, y sentenciaba la liga. La celebración de ese gol, fue de lo más hablado en ese partido; ya que Cristiano, tras anotar ese gol, hizo el gesto de “calma’’, haciendo así más “inri’’ en el feudo culé. El partido terminó 1-2, y el Madrid acabó ganando la liga con 100 puntos.
A partir de ese partido, ese gesto de calma del portugués (que recordó de alguna manera al gesto de Raúl, cuando mandó a callar al Camp Nou), se convirtió en algo habitual en el de Madeira, ya que fue el primer gol, pero no el último, que el ‘7’ del Madrid anotaba en el campo del máximo rival.