Todas las ligas europeas pretenden volver a esa normalidad tan deseada en la que las propias competiciones puedan reanudar su curso. En el caso de la Premier League, como según informa el diario ‘The Telegraph’, ha propuesto una serie de medidas para evitar la propagación del virus como son: prohibir la celebración grupal de los goles, escupir al césped y cambiarse de camiseta entre jugadores.
Tales medidas podrían extenderse también hasta la temporada que viene para así garantizar a los futbolistas una vuelta todavía más segura a los terrenos de juego. No obstante, la aplicación de dicha propuesta quedaría en `standby´ a expensas de lo que el primer ministro británico Boris Johnson anunciara sobre el confinamiento.
Además, ello también quedaría supeditado a la decisión conjunta que alcanzaran los veinte clubes participantes sobre la evaluación de tales medidas y la vuelta a los estadios en la reunión del próximo lunes 11 de mayo. En ella también serán planteadas otro tipo de normas como el uso de campos neutrales, la reducción de la duración de los partidos y la introducción de más cambios.
Asimismo, tener que jugar forzosamente los encuentros restantes de la temporada en un campo neutral sería un requisito indispensable para que se pueda confiar en la vuelta estable a los campos, como ya anunció Richard Bevan, director ejecutivo de la Asociación de Entrenadores.
Sin embargo, pese a todas las medidas pretendidas a llevarse a cabo, no todos los jugadores ven de una forma clara y concisa que pronto se pueda poner el balón a rodar sobre el césped dentro de un marco de seguridad colectiva, ya que precisamente, el fútbol es un deporte de constante contacto. Por ello, y dadas las circunstancias, las constantes aglomeraciones que se puedan llevar a cabo como en un saque de esquina o una discusión con el árbitro son situaciones que se deberán de analizar.
Son muchas las situaciones que se escapan de aquello que la normativa pretendería proponer. Por ello, los protagonistas de este espectáculo deportivo no verían con buenos ojos un regreso tan rápido y desmesurado.