El portero del Granada CF, Rui Silva, ha sido entrevistado por los aficionados en la cuenta de Instagram del club nazarí. Entre otros temas, habló sobre la actualidad en el club y contó alguna curiosa anécdota sobre su carrera.
El portugués comenzó comentando su visión sobre la vuelta a los entrenamientos: “Tenemos que seguir las normas: desinfectar botas, guantes y cambiarnos en casa”. Además, añadió que: «en estos casos, suelo ser detallista. Hay que tener todos los cuidados y salir de casa lo menos posible. Sólo para lo necesario”.
Para darse a conocer entre los aficionados, Rui Silva confesó algunos detalles sobre sí mismo: “Antes de salir al campo salgo con el pie derecho. Me gusta besar los palos antes de los partidos. Son supersticiones que tengo”. El portero, que se define como una persona tranquila, comentó que: “La timidez es una forma de protegerme a mí mismo. Hablo bien el español, pero es un idioma que a nivel de chistes a veces no entiendo. Poco a poco voy cogiendo confianza. Soy extrovertido y alegre”.
Como guardameta, guarda con especial cariño una de sus intervenciones: «La parada de Osasuna fue de las más bonitas. Pero si es gol me habría jodido porque estaba más adelantado de lo que debía”. También tuvo palabras para quien consideró de los mejores arietes contra los que ha jugado: “Con los delanteros de referencia siempre tienes que tener cuidado. Este año, el delantero al que noté mucha calidad y jugó muy bien contra nosotros fue Raúl de Tomás”.
Por último, el portugués dio su opinión sobre el futuro del club en LaLiga: «Esperemos ganar cada partido y hacer los máximos puntos posibles. El secreto de este equipo es la unión y la solidaridad». También aprovechó para lanzar un mensaje de unión con la afición nazarí: “Que nos animen desde casa que nosotros daremos lo máximo para ganar los partidos. No tenemos techo y no sabemos hasta donde podremos llegar».
Rui Silva, quien está cuajando una excelente campaña, ha conseguido dejar su portería a cero en diez de los 26 partidos que ha jugado en LaLiga. Será sin duda una de las piezas clave del Granada, equipo sólidamente plantado en la novena plaza, y con dos posibles objetivos a la vista: conseguir una cómoda permanencia para seguir creciendo, o incluso soñar con estar el año que viene jugando en Europa.