A las 21:30 acababa el encuentro que enfrentaba al Levante UD y el Sevilla FC, correspondiente a la jornada 29 de LaLiga Santander. El choque se disputaba en el estadio Camilo Cano de la Nucía, en Alicante, debido a las obras que se están llevando a cabo en el Ciudad de Valencia. El partido finalizó con un empate a uno, quedándose, por lo tanto, cada conjunto con un punto más.
Alineaciones
Los locales salieron con su clásico esquema de 1-4-4-2, con una medular formada por jugadores de una gran calidad en el toque. Concretamente, las bandas estaban ocupadas por Campaña y Rochina que son jugadores con tendencia a ofrecerse por zonas interiores, alejándose así de las bandas y dejando el hueco para que los laterales puedan subir.
Paco López apostaba por un once muy similar al que sacara contra el Valencia en Mestalla, aunque llevando a cabo algunos cambios a causa del desgaste de los futbolistas. Asimismo, la sanción de Roger Martí condicionó el once titular con el que salió el equipo levantino al encuentro. Así, la alineación de los granotas fue la siguiente: Aitor, Coke, Bruno, Vezo, Toño, Rochina, Vukcevic, Melero, Campaña, Morales y Borja Mayoral.
Por otro lado, Julen Lopetegui apostaba por una alineación muy similar a la que sacó en el Gran Derbi. En este caso, manteniendo el esquema de 1-4-3-3 que tan buenos resultados le ha dado, el técnico vasco buscaba el desborde en las bandas con Ocampos y Munir, así como la solidez en el centro del campo con Gudelj y Joan Jordán. Estos estaban acompañados por Banega, que ponía la creatividad en la medular.
Así, el once con el que salieron los sevillanos al terreno de juego fue: Vaclík, Jesús Navas, Diego Carlos, Koundé, Escudero, Gudelj, Joan Jordán, Éver Banega, Lucas Ocampos, Munir El Haddadi y Luuk de Jong.
El partido
Comenzaba el encuentro con un Levante que ejercía una presión muy alta, y un Sevilla que pretendía hacerse con el control del balón. En este contexto, la primera jugada de peligro fue protagonizada por Melero, mediocampista del equipo de Paco López, que en el minuto tres remataba desde el lateral del área pequeña un pase largo que recibía desde atrás. Sin embargo, Vaclík logró despejar el chut sin mayores problemas. De esta forma, durante los primeros minutos ambos equipos ofrecieron un partido bastante igualado, con llegadas al área por parte de los dos conjuntos y con una fuerte disputa del balón en el centro del campo.
Pese a que el número de faltas fue escaso, una falta de Rubén Vezo sobre Ocampos muy cerca del área (aunque algo escorada) supuso la primera jugada de peligro real para los de Lopetegui. La falta, sacada por Munir El Haddadi, acabó golpeando en el travesaño. El rechace del balón por parte del palo finalizó en una nueva jugada de peligro, que no pudo ser definida por Lucas Ocampos, pues no encontró el balón para rematar. A partir de esta jugada, el partido comenzaba a animarse y a adquirir una velocidad muy alta. Tanto es así que después del chut al larguero se produjeron por parte de los dos equipos múltiples jugadas seguidas muy verticales y rápidas.
A la mitad de la primera parte, el juego se había calmado, y el equipo de Julen Lopetegui había logrado hacerse con el control de la posesión. Mientras, el Levante esperaba en su área para poder salir al contragolpe. En esta tesitura se desarrolló la mayor parte de los últimos 20 minutos del primer tiempo: el Sevilla llegaba al área, aunque le costaba encontrar portería por la intensa defensa de los valencianos; los de Paco López no lograban salir con claridad y, cuando lo hacían, la jugada no tenía trascendencia.
Tan solo se pudo destacar un remate de Koundé después de un balón parado, que salió del terreno de juego rozando el poste, y un casi remate de Borja Mayoral a pase de Rubén Rochina que quedó en nada. Con algunos acercamientos al área con cierto peligro por parte del Levante terminó una primera mitad muy competida.
Pitaba Hernández Hernández el inicio del segundo tiempo y, pasados unos segundos, llegaba el primer tanto del partido. Diego Carlos ponía un balón en largo a Munir que, desmarcado, lograba dar un pase horizontal al centro del área. El servicio del marroquí terminaba en gol de Luuk De Jong, que remató con fuerza al interior de la red. El conjunto valenciano trataba de reaccionar al golpe acercándose al área, pero la férrea defensa sevillista no facilitaba las cosas. Además, los de Lopetegui seguían buscando la portería, hasta el punto de que minutos después del gol, Diego Carlos remataba un córner al fondo de la red, pero el tanto era anulado por falta del mismo defensa central.
Por si fuera poco, los hispalenses cada vez llegaban con más facilidad al área de Aitor Fernández. Como consecuencia de la creciente confianza de los de Lopetegui, todas sus llegadas al área eran jugadas de peligro que salían fuera o eran despejadas por el portero granota. Con el objetivo de provocar la reacción de su equipo, Paco López llevaba a cabo los primeros cambios; a la par, llegaban las sustituciones por parte del Sevilla también.
Tras los cambios, el Levante parecía hacerse con un mayor control del balón, logrando llegar al área rival con más frecuencia. Sin embargo, las sensaciones en el terreno de juego eran de control del partido (que no del balón) por parte del cuadro andaluz y de frustración en una escuadra granota que buscaba, con paciencia, la forma de llegar arriba. Con las incorporaciones al verde de Hernani y Sergio León, parecía que el Levante lograba encontrar esa velocidad y movimiento del que llevaba careciendo durante la mayor parte de la segunda mitad.
En el minuto 85 llegaba una de las ocasiones más claras del Levante en los pies de Hernani. El extremo lograba irse de Navas en el interior del área y encaraba al guardameta sevillista, que se daba por vencido muy rápido. Sin embargo, el tiro casi a puerta vacía era despejado por Koundé de forma milagrosa. Justo después de esta gran ocasión para los granotas, el equipo de López insistía por la banda derecha. En este caso, Miramón (que había salido desde el banquillo) avanzaba con fuerza hacia la línea de fondo y ponía un pase tenso al interior del área. Un mal despeje de Vaclík y un rebote en Diego Carlos provocaron que la pelota entrara en la portería, poniendo así las tablas en el marcador.
A raíz del tanto, el Levante se hacía fuerte en el área sevillista y lograba encerrar a los rojiblancos momentáneamente. Un buen chut de Mayoral despejado por el portero y varios saques de esquina las últimas oportunidades que se vieron en el terreno de juego. Así, se ponía el punto final a un encuentro tenso y con buen ritmo, que no se decidió hasta el final.
Foto vía: Levante UD