El Sevilla FC se enfrentará mañana al Manchester United en las semifinales de la Europa League, donde ambos buscarán lograr un billete hacia la final. En la previa de dicho partido, el defensa Diego Carlos ha concedido unas palabras a la prensa de cara al encuentro sobre sus capacidades físicas y técnicas, acerca del partido contra el Wolves, sobre su estancia en Sevilla y su futuro en el Club.
Con respecto al partido de mañana, el brasileño mostró admiración y respeto, pero nunca miedo al United, ya que el Sevilla FC se ha ganado en los últimos años el respeto de los grandes clubes de Europa, coronándose el rey de la Europa League. «Miedo nunca. El respeto que debemos tenerle a un club histórico, que ha ganado muchas cosas. Pero el Sevilla también ha conseguido títulos estos años, cinco de Europa League. Así que supongo que el respeto será mutuo», sostuvo el defensa.
Diego Carlos sorprendió a todo el mundo la primera vez que se quitó la camiseta destacando su prodigioso estado físico, a lo que el jugador sostiene que «lo mío es natural y siguen sin gustarme los gimnasios. Pero en fútbol hay jugadores muy rápidos y debemos prepararnos para todo».
Además de ello, destaca su gran golpeo de balón, dado que la potencia de su remate facilita los balones en largo a los delanteros lo que propicia jugadas de peligro en el área rival. «Todos los compañeros me preguntan eso, si me resulta fácil. Y difícil no es. Desde que empecé a jugar al fútbol me encanta golpear en largo y fuerte, y también tirar a portería, y no voy a cambiar esas cualidades», afirmó el brasileño.
Al ser preguntado sobre la acción de Traore del pasado partido de cuartos contra el Wolves, el cual ganaron con un gol en el minuto 87, el central sostuvo que «ya sabía que tenía mucha velocidad y una gran potencia de arrancada, pero en esa primera jugada del penalti nos sorprendió. Traoré es rapidísimo». Dicha acción derivó en un penalti realizado para evitar el mano a mano entre Bono y Adama pero se saldó con fortuna para el cuadro hispalense. «Los defensas no queremos hacer penaltis pero hay momentos en los que tienes que arriesgar. Traoré es un velocista y por muy poco no toqué la pelota. Luego, Bono hizo una gran parada y nos salvamos», admitió el futbolista.
Al jugador le ha sorprendido principalmente de su estancia en Nervión la gran complejidad que mantiene la plantilla: «Sobre todo, el grupo que tenemos. Algunos amigos míos creían que en equipos como el Sevilla, tan grandes, las relaciones en el vestuario iban a ser diferentes… pero somos una auténtica familia», dijo el futbolista mostrándose agradecido del grupo de compañeros que atesora.
No obstante, a todo jugador que ofrece un rendimiento impecable le surgen muchos pretendientes, pero el futbolista se encuentra feliz en el club y destaca la fidelidad al club por delante de todo, palabras que posiblemente den a entender su permanencia en el club el próximo curso: «Yo no me pongo precio, lo ponen los clubes. A mí me encanta proteger a mi equipo y ser fiel. Creo que el fútbol necesita fidelidad y amor a los colores siempre, y tener mucho orgullo», aclaró.
El Sevilla FC afrontará mañana un correoso y difícil partido que seguro que afrontarán con las máximas ganas e ilusiones, ya que la sexta Europa League está más cerca que nunca.