Tras la derrota de ayer y de quedarse a las puertas de una final europea, el Manchester United pone fin a una temporada que, aunque es de transición, ha sido muy notable y esperanzadora de cara a la siguiente.
Los Red Devils cayeron en un partido que, aunque hubo tramos de dominio por su parte, no fueron capaces de concretar en los momentos importantes. Un Bono superlativo dio al Sevilla el pase y puso fin a una temporada prometedora del Manchester United.
Por primera vez tras la salida de Alex Ferguson, el cuadro Red parece ver la luz al final del túnel de la mano de Ole Gunnar Solskjaer, hombre que ha sido capaz de sacar a flote a un equipo que se encontraba en una situación complicada.
El cuadro de Manchester comenzó la temporada dando sensación de inestabilidad, irregularidad y de seguir sin poder revertir esa situación en la que se encontraban, por lo que en el mercado invernal decidieron reforzarse con las llegadas de Bruno Fernandes e Ighalo. El portugués ha conseguido plasmar a la perfección lo que venía necesitando el equipo, prueba de ello es que ha conseguido en tan solo 14 partidos darle a su equipo con ocho goles y siete asistencias, la clasificación a la Champions League.
También cabe destacar la aparición de jóvenes talentos de la cantera como sobre todo las irrupciones de Brandon Williams y Mason Greenwood. El lateral izquierdo y el delantero han demostrado al técnico sus cualidades y parecen haberse hecho un hueco en la plantilla de cara al futuro.
De cara a la próxima campaña, el United tiene en mente reforzar la plantilla de cara a intentar pelear por el título de campeón, y Solskjaer ya habría hecho saber al club sus pretensiones principales. El técnico noruego habría pedido la llegada de un extremo diestro, un delantero centro y un central, aparte, dependiendo de las salidas que se produzcan, podrían producirse las llegadas de un lateral zurdo y un acompañante para Paul Pogba en el pivote.