En el sur de Inglaterra tuvo lugar un encuentro entre dos equipos, que llegaban con dinámicas de resultados muy contrapuestas. El equipo de Hassenhüttl, acumulaba cinco derrotas consecutivas que había provocado que el buen rendimiento mostrado al inicio de temporada se haya visto empañado por esta mala racha. En cambio, el Chelsea es un nuevo equipo tras la llegada de Tuchel, destacando por su fiabilidad defensiva y la solvencia para poder sacar adelante sus encuentros llegando a los cinco partidos sin conocer la derrota desde la llegada del alemán.
Alineaciones
En el Southampton regresaban los 3 centrales con el debut como titular de Mohamed Salisu que compartió zaga con Bednarek y Vestergaard siendo estos los encargados de proteger la portería de Alex McCarthy. El esquema que utilizó Hassenhüttl es un 3-4-2-1 con Oriol Romeu y James Ward Prowse en la sala de máquinas, escoltados por Bertrand por la izquierda y Djenepo por la derecha, que entraba por Stuart Armstrong respecto al anterior encuentro. Más avanzados se encontraban Redmond y Minamino que fueron los encargados de enganchar con Danny Ings.
Thomas Tuchel sigue fiel a su esquema (3-4-2-1), y respecto al encuentro contra el Newcastle entraba Reece James para ocupar el sitio que ocupó Hudson – Odoi, y Edouard Mendy volvió a la portería tras los minutos que brindó, el ex entrenador del PSG, a Kepa Arrizabalaga ante el Newcastle. En defensa jugaron Zouma, que entraba por Christensen, Rudiger y Azpilicueta; en el centro del campo salió de titular N’Golo Kanté que jugó junto a Kovacic dejando a Jorginho en el banquillo. Las bandas estuvieron ocupadas por Marcos Alonso y Reece James; más avanzados se encontraban Mount y Werner que acompañaron a Tammy Abraham en la zona de ataque.
El encuentro
Primer encuentro de la jornada de sábado en la Premier League, que nos tiene más adelante preparado un Liverpool – Everton que tiene pinta de ser bastante entretenido. El Southampton busca en este partido dar vuelta a su situación, intentando encontrar de nuevo los tres puntos para poder volver a esas buenas sensaciones, que si ha vuelto a tener el Chelsea tras la llegada de Thomas Tuchel, que aún no conoce la derrota en Premier League.
Los primeros minutos de encuentro se pudo ver a dos equipos que no eran capaces de dominar el uno al otro, con posesiones muy cortas y sin llegar a provocar peligro en ninguna de las dos áreas. El Chelsea centraba su peligro por el lado izquierdo de su ataque donde Moussa Djenepo no acababa de realizar las funciones defensivas que se le piden en esa posición de carrilero/banda derecha, dejando el carril libre para las llegadas de Marcos Alonso.
Con el paso de los minutos, los londinenses fueron haciéndose con el dominio del partido, encerrando a los saints en su propio campo con posesiones largas, una circulación de balón calmada y sin tomar demasiados riesgos, pero sin acabar de conectar con Tammy Abraham por culpa del buen trabajo defensivo realizado por los tres defensas.
Pero para sorpresa de muchos, en el minuto 33, en uno de los pocos momentos del Southampton ocupando el campo del Chelsea, Nathan Redmond se encuentra totalmente solo para poder dar rienda suelta a su imaginación y filtra un pase tremendo que deja solo a Takumi Minamino que define con maestría con un amago ante la presencia de Edouard Mendy. Tras el gol, el Chelsea siguió dominando el control del balón, pero sin crear peligro a través de esa circulación de pelota hasta, que en el 37’, Zouma hizo que McCarthy se luciera tras cabecear una falta sacada por Marcos Alonso. Con este resultado llegaría el encuentro al descanso, siendo la primera parte una definición de la efectividad, donde el Southampton con su única llegada al área logró desequilibrar el marcador a su favor.
Para esta segunda parte, Thomas Tuchel dió entrada a Callum Hudson Odoi que sustituía a Tammy Abraham que seguía tocado de su tobillo. El Southampton empezó la segunda parte queriendo cambiar su rol en el encuentro queriendo ser más activo, pero el Chelsea, tras los primeros minutos, volvería a imponer su dominio. Casi llegando a los diez minutos de reanudación, Danny Ings cometería penalti sobre Mason Mount que se encargaría de materializar poniendo las tablas en el marcador de nuevo.
Tras el empate, el Southampton igualaría fuerzas con el Chelsea siendo el principal protagonista al tener mucho más control del balón que la primera parte, provocando llegadas y jugadas a balón parado. En una de ellas, en el minuto 70, Jannik Vestergaard estrellaría un balón en el larguero después de rematar de cabeza un centro de Redmond que siguió un saque de esquina largo sacado por James Ward Prowse.
En los minutos finales, Thomas Tuchel dio entrada a Ziyech y Jorginho para intentar romper la línea defensiva que apenas ha dado signos de debilidad y con su entrada se busca que llegue ese último pase para conectar con Timo Werner. Ralph Hassenhüttl daría entrada a Nathan Tella y Che Adams sin ánimo de buscar una revolución en el esquema, sino dar un poco de piernas y frescura al equipo para los instantes finales del encuentro. Llegando al minuto 84, Mason Mount se sacaría de la manga una gran jugada por banda izquierda logrando centrar el balón al segundo palo donde Reece James remataría por encima del larguero.
Llegó al final el partido, en un encuentro en donde cabe destacar el gran rendimiento defensivo de los tres centrales del Southampton, con una gran actuación de Mohamed Salisu y la gran actuación individual de Mason Mount por parte de los blues que han dominado el encuentro pero sin crear ningún peligro para McCarthy. Un empate, que deja con mejor sabor de boca a los de Hassenhüttl, ya que tras cinco derrotas consecutivas, han vuelto a sumar puntos.