Durante esta fase de la temporada, las lesiones empiezan a ser el mayor enemigo de los equipos. El Celta es uno de los equipos que ha sufrido un calvario en la enfermería, pero ahora ve la luz al final del túnel.
Rubén Blanco, Hugo Mallo y Aidoo están cerca de recuperarse y volver a competir tras sus diferentes problemas médicos.
El primero de ellos, el portero, ya se encuentra al 100% tras la grave lesión que se produjo el pasado 7 de julio, un arrancamiento del tendón del recto femoral derecho.
Casi 4 meses después, el mosense ya entrena con sus compañeros en A Madroa. De momento no ha vuelto a defender la portería gallega, pero precisamente esta semana podría recibir el alta médica y estar en el choque ante la Real Sociedad.
Misma situación en el caso del central. Una rotura fibrilar en el bíceps femoral de su pierna derecha le apartó de los terrenos de juego. El canterano ya se probó la semana pasada para jugar ante el Levante. Sin embargo, los médicos le pararon, al menos hasta esta semana.
Por último, Aidoo, que daba positivo en las PCR el pasado 16 de octubre, posiblemente también recibirá el alta médica en los próximos días. Tras perderse los partidos ante Atlético y Levante podría reaparecer ante la Real Sociedad, aunque por ahora no se ha ejercitado junto a la plantilla celeste.
Buenas noticias para el Celta de Vigo que recupera a tres jugadores importantes que sin duda ayudarán a conseguir todos los objetivos propuestos en esta temporada ilusionante.