Las polémicas arbitrales en LaLiga son el pan de cada jornada en la competición española. Parece ser que, jornada tras jornada, algún equipo se siente perjudicado a razón del juicio arbitral que se realiza, y que, sobre el césped, puede perjudicar la dinámica de algunos clubes en los partidos.
Hasta el momento, y sobre todo en las últimas jornadas, cada fin de semana una acción arbitral es protagonista en el desarrollo de la competición. Tras los partidos, como es común, cualquier profesional del balompié tiene la posibilidad de dar su opinión sobre el choque, y algunas veces hablan sobre el propio arbitraje. Entrenadores como Manuel Pellegrini o futbolistas como Joel Robles, ambos del Real Betis, se han expuesto dando su punto de vista sobre arbitrajes que pudieron perjudicar al cuadro verdiblanco, concretamente tras el choque frente al Madrid. En otro caso, Juan Camilo ‘Cucho’ Hernández ha sido el último futbolista en salir a dar su crítica sobre el arbitraje, tras un polémico penalti que dio la victoria al Granada en el partido que enfrentaban al Getafe con el conjunto nazarí.
Entre otras declaraciones, el futbolista azulón comentó: «No fue penalti. Nunca me gusta meterme en polémicas arbitrales. Soy de los primeros que digo que su trabajo es difícil, pero se complican la vida solos. No hay ningún problema en tomarse dos minutos en ir a ver la jugada y ya está. Me parece de locos. Pero es lo que hay. Lo mínimo que tenía que haber hecho el VAR es decirle al árbitro que la revisara. Que no se inmute y no le digan que vaya a revisarla, creo que es más culpa del VAR que del propio árbitro que está en el campo. El árbitro interpreta una cosa, piensa que es penalti, pero para eso tenemos el VAR, para que vaya y analice. Si hubiese ido, no habría pitado penalti. Sorprendentemente no fue y parece que en el Coliseum no les gusta ir a ver el VAR«.
Duras y comprensibles declaraciones que, a día de hoy, tal y como ha informado Cadena COPE, las declaraciones han sido denunciadas por el departamento de integridad de la RFEF ante Competición. Esta información parece poner en evidencia a un organismo al que no le sienta nada bien recibir críticas, pero que tampoco aparenta trabajar con afán en la búsqueda de una solución clara para terminar con las polémicas arbitrales. Mientras que ligas extranjeras como la Premier priman la transparencia, con el claro ejemplo de reproducir en directo el trabajo del VAR en acciones como el fuera de juego, en la competición española cada arbitro interpreta a su manera, y sin ninguna mala intención, acciones similares que una jornada si son punibles y otra jornada no se castigan.
Asimismo, proponer sanciones a declaraciones de futbolistas o entrenadores supone una aparente censura con el objetivo de no acaparar más miradas en la clara evidencia de tener un sistema de juicio arbitral que no es, en ningún caso, claro e idéntico para hacer la misma justicia en cualquiera de los campos españoles.
Por lo tanto, aún queda mucho recorrido por delante para seguir trabajando y mejorando la competición española. Sobre la teoría, LaLiga reúne potencial para ser la mejor del mundo, pero en la práctica no solo vale tener a los mejores futbolistas y equipos europeos, si no establecer una base sólida en el reglamento y en el VAR que facilite la tarea a los árbitros en el césped español. Y, por supuesto, el camino a seguir idóneo nunca será acallar las bocas que se quejen, en todo su derecho, de aquellas dudosas actuaciones que puedan perjudicar a las entidades futbolísticas de LaLiga Santander.