El Molde, rival del Granada en octavos de la Europa League, ha propuesto trasladar el partido de vuelta a Hungría ante la dificultad de jugarlo en su país, Noruega. El país escandinavo ha endurecido recientemente las medidas, con cierres de escuelas y comercios, por lo que la disputa del choque para los locales en el Aker Stadion está descartada.
Así, el equipo noruego plantea reubicar el duelo ante el equipo nazarí en Hungría, país que recientemente albergó el Borussia Mönchengladbach-Manchester City de la Champions League. No sería una novedosa situación para el Molde, al haber disputado su duelo de dieciseisavos ante el Hoffenheim en el estadio del Villarreal. Mientras, los blanquiazules se encuentran realizando un stage en Benidorm a la espera del inicio de su competición liguera, fijado a principios de abril. Teniendo esto en cuenta, el entrenador del Molde ha salido al paso ante la hipotética y razonable posibilidad de disputar ambos choques en suelo español. Erling Moe, en declaraciones a medios de la televisión de su país, aseguró que disputar los dos partidos en España sería dotar de ventaja al Granada puesto que gozaría de mayor comodidad.
Así las cosas, el Puskas Arena de Budapest es el mejor situado para albergar el duelo. Un estadio con una capacidad para 67.215 personas donde, asimismo, el Liverpool y el Red Bull Leipzig se enfrentaron en la ida de los octavos de final de la Champions League. Por lo tanto, el duelo en tierras húngaras entre noruegos y nazaríes se disputaría el 18 de marzo, una semana después del partido de ida en tierras granadinas.
Cabe recordar que no sería la primera vez en la presente edición que un equipo español ha de disputar un duelo en un estadio neutro. En la ronda de dieciseisavos, la Real Sociedad y el Manchester United debieron trasladarse a Turín para jugar la ida de la eliminatoria, también por medidas relacionadas con la pandemia del coronavirus.