Desde su vuelta al Milan, el viento siempre ha soplado de cara para Zlatan Ibrahimović. Nueve años después y tras su periplo en París, Manchester y Los Ángeles, tanto los rossoneri como el sueco ganaban: la institución se levantaba de su caída en picado y el hijo pródigo de la ciudad lombarda se rehacía como héroe local. Sin embargo, las cosas se torcieron para Ibra en el choque frente a la Juventus de la semana pasada.
Zlatan Ibrahimović no podrá asistir a la Eurocopa debido al tratamiento que tendrá que seguir para recuperarse de su lesión en el partido frente a la Vecchia Signora. Así lo ha confirmado la Federación de Fútbol de Suecia mediante un comunicado en Twitter. «Hoy, Zlatan ha informado a Janne Andersson que su lesión le impedirá participar en el Campeonato de Europa de este verano. ¡Recupérate Zlatan, esperamos verte pronto en el césped!», reza la nota.
El seguimiento de su esguince, de seis meses de duración, se ve solapado con el inicio del campeonato internacional, que comienza en menos de un mes. El de Mälmo, que había renunciado a la Selección en 2016, no podrá liderar al combinado báltico, que no pasa a la fase eliminatoria desde 2004, año de debut de Ibrahimović en el torneo.
El primer partido del león sueco en la Eurocopa hubiera sido precisamente contra España, a la que le marcó el gol del 1-1 en el emparejamiento del grupo D en el campeonato de 2008, que finalmente levantó la Roja. La mecha de Zlatan se acaba, pudiendo haber sido su última oportunidad para participar en un campeonato internacional de selecciones a sus 39 años. Veremos si las lesiones le dan tregua para el atípico Mundial 2022 de Catar, que se celebrará en diciembre debido a las elevadísimas temperaturas veraniegas del país árabe.