La directiva celtista prometió a principios de verano la incorporación de varios futbolistas para reforzar las distintas posiciones. No obstante, las promesas no se han cumplido.
Y es que los aficionados celtiñas esperaban una revolución tras los malos resultados de la pasada campaña. Sin embargo, una de las carencias más significativas para el conjunto gallego se encuentra en la línea de ataque. A día de hoy se encuentran sin un delantero centro, pues a Iago Aspas se le considera como un falso ‘9’ por su gran movilidad y peso en la construcción de juego.
Una situación muy comprometida para Óscar, debido a que los números del equipo a nivel goleador del no han estado al nivel de otras temporadas. Durante la campaña 2019/2020 en LaLiga el Celta consiguió anotar un total de 37 gol con un promedio de 0.97 goles por partido. Unos números que contrastan con los 59 goles en la 2017/2018 o los 53 tantos en la 2018/2019. Los números muestran una realidad: la falta de gol. Con tan solo 18 jugadores en la plantilla del primer equipo, el técnico sabadellense contará sólo con Iago Aspas como referencia ofensiva, pues la actual plantilla no posee otro goleador nato de ese nivel.
La cantera será fundamental para suplir a Iago Aspas en caso de lesión, por lo que Óscar deberá buscar en la plantilla del filial futbolistas capaces de asumir ese rol.
Sin duda se trata de una situación poco favorable para el Celta, pues varias lesiones podrían trastocar los planes que ha llevado la directiva a cabo y provocar un efecto dominó que acabe reflejándose en el terreno de juego.